ARGIAN inició su andadura en 2016, partiendo de un impulso que nacía de ofrecer luz a lo sombrío.
Sabemos que aquello que se halla en nuestro inconsciente domina nuestras vidas y las torna mecánicas.
Podemos señalar que nuestra existencia (como lo indican tantos mitos universales) resulta un viaje, y como seres humanos somos seres viajeros inmersos en una búsqueda.
Al igual que los faros sirven de referencia y orientación, con sus luces y sus frecuencias, continuamos con la clara vocación de que este espacio sirva de referencia y guía a la hora de encontrar el sentido de nuestra búsqueda.
Para ello, ofrecemos un espacio de encuentro, favoreciendo la toma de conciencia y la responsabilización de aquellos aspectos personales que interfieren y conllevan sufrimiento. Mantenemos las puertas abiertas, desde nuestra experiencia profesional y vital, a todas aquellas personas que se encuentren en un momento de crisis personal, desorientación, desbordadas por síntomas psicosomáticos o atenazadas por vivencias de insatisfacción personal.